Comunidad Científica Asesora al Gobierno de Cuernavaca en la Contingencia

Por Jaime Arizmendi Gonzales

CxU News/  Cuernavaca es un foco rojo de posible contagio de COVID-19 por su densidad poblacional y sus características geográficas.

Para generar ciertas políticas y directrices acorde a la población y a las características del municipio de Cuernavaca, un grupo de científicos y el gobierno municipal trabajan en colaboración. “Somos el brazo técnico del municipio para dar sustento científico a las medidas sugeridas para afrontar la pandemia causada por COVID-19. Evaluamos qué tan rígidas o laxas deben de ser las directrices obviamente tomando en cuenta las acciones a las que exhorta el Gobierno Federal”, dijo la doctora Brenda Valderrama Blanco, presidenta de la Academia de Ciencias de Morelos A.C.

La población de Cuernavaca, el área geográfica y su colindancia con el estado de México, Puebla y Ciudad de México, son caracteristicas que se tomaron en cuenta para medir el nivel de riesgo, pues es una zona de gran conectividad y movilidad poblacional. “La densidad poblacional a nivel nacional, en promedio, está entre 61 y 92 habitantes por kilómetro cuadrado (km2) y de forma impactante,  en Cuernavaca hay mil personas por km2 en fines de semana, puentes o semana Santa. Estos datos marcan a la ciudad como un foco rojo, por lo que había que adelantarnos para evitar la transmisión del virus”, mencionó la doctora Ana Isabel Burquete García, Instituto Nacional de Salud Pública.

Las cuatro directrices que se han tomado en Cuernavaca son: cerrar los giros comerciales que implican riesgo (bares, discotecas, gimnasios). Quedando a finales de marzo solo los que tienen que ver con la alimentación y la salud. Además se viralizó el uso de cubrebocas fuera del domicilio y de forma obligatoria para el transporte público. “Cualquier medida de protección no resta sino suma”, expone Valderrama Blanco.

Además, en el rubro de alimentación se permitió el funcionamiento de los supermercados, mercados municipales y puestos callejeros porque le permite a las personas encontrar alimentos, en este último caso, sin tomar transporte público. Los científicos determinaron no afectar la línea de suministro de alimentos pero sí operar con medidas de higiene, ya que el mercado principal recibe en un día hasta cinco mil personas.

Esta crisis nos plantea dos retos importantes en salud y economía. En Cuernavaca la economía está basada en el servicio fundamentalmente en el pequeño comercio y turismo por lo que entre el 30 y el 50% de la población se quedó sin empleo o está en riesgo de perderlo. “Es necesario que el gobierno municipal provea alimentos a este grupo de personas”, puntualizó Brenda Valderrama.

Por otra parte, con la finalidad de desarrollar una estrategia intermunicipal y homologar criterios que les permita contender con esta crisis y para salir más pronto de ella, el brazo técnico de científicos de Cuernavaca se ha reunido con otros 20 presidentes municipales, de 36; también con empresarios, dueños de escuelas privadas y con los secretarios de desarrollo económico de otros municipios.

Esta es una crisis de salud pública que impacta las dinámicas sociales, la salud mental, la economía y el ambiente. Comprobamos una vez más la importancia del trabajo interdisciplinario que ante esta crisis es fundamental. “Nosotros somos el brazo técnico, pero tenemos otros dos brazos operativos que nos han permitido llegar a la sociedad para el cumplimiento de estas directrices: comunicación social y protección civil”, declaró Ana Isabel Burquete García.